Nuestro Programa Salud 360º en la revista Ciudad con Alma
Ciudad con Alma. Septiembre-Noviembre 2018 de 2018
Una plantilla feliz y sana, la mejor base para un trabajo eficiente
Una plantilla no está compuesta por trabajadores; sino por personas en el sentido más amplio de la palabra. Las personas, además de profesionales que desarrollan su vocación, tienen cuestiones que resolver fuera de su despacho. No existe el desdoblamiento. Persona y trabajador habitan en un mismo cuerpo y se afectan mutuamente; por lo que el bienestar del ser humano redunda indiscutiblemente en la del ser laboral. Una máxima que practica el resort hotelero Holiday World, perteneciente al Grupo Peñarroya.
Desde el Departamento de Las Personas, como les gusta llamarse Recursos Humanos en este grupo de empresas, imparten cursos gratuitos que hacen la existencia más fácil a su equipo. Saber cómo curar una herida, prestar atención al comportamiento de menores en casa para evitar futuras adicciones o aprender a comer bien para vivir mejor son algunas de las materias que aparentemente nada tienen que ver con el desempeño cotidiano de su plantilla; pero que la convierten en un conjunto humano mejor preparado. Y al final, son personas que trabajan para otras personas.
Dos jornadas al mes, fuera de horario laboral, los compañeros y compañeras del resort pueden asistir a un conjunto de cursos bajo los siguientes títulos: Enfermeros en casa, Cultura en reconocimiento de adicciones, Enfermedades cardiovasculares y la vida sedentaria, Nutrición y su repercusión y Taller sobre la felicidad como herramienta, nos enumeran desde el propio centro.
Formación gratuita
Los más de 700 empleados del grupo están invitados a disfrutar de estas formaciones que la empresa financia pero que les ofrecen gratuita y voluntariamente. “La asistencia no para de crecer”, nos cuentan a Ciudad con Alma desde la compañía. Y todo porque la voz sobre la utilidad real de estos talleres se difunde gracias al interés que despiertan.
De esta forma, la responsabilidad social del grupo -con 52 años de trayectoria- va más allá de su apuesta por la sostenibilidad ambiental y se amplía con el reto de reconocer a su plantilla como un conjunto de personas cuya felicidad redunda en sus propias vidas y, por supuesto, en las sonrisas que regalan a sus huéspedes.